Ahora que tienes una cobaya

Ahora que tienes una cobaya

No es raro ver hoy en día, que cada vez son más los que se animan a adquirir una cobaya como mascota . Por ello, como buenos propietarios, deberíamos conocer unos puntos básicos para poder atenderlos adecuadamente.

La cobaya o conejillo de indias es originaria de Sudamérica, lugar donde ya eran domesticadas en el siglo XVI por los incas.

Las cobayas domésticas, cuyo nombre científico es Cavia porcellus proviene de los conejillos silvestres Cavia aperea, originarios de Argentina, Uruguay, Brasil y Perú, distiguiéndose de estos por su cabeza mofletuda, su cuerpo redondeado y su gran variedad de coloridos.

Es importante tener en cuenta que las cobayas pertenecen al orden de los roedores donde se incluyen también los hámsteres, ratas, ratones, ardillas y jerbos entre muchos otros.

 

COMPORTAMIENTO y CONOCIMIENTOS BÁSICOS:

Entender el comportamiento básico de la cobaya es la clave para el mantenimiento de una buena relación entre mascota y propietario.

En la naturaleza suelen formar grandes colonias que viven en madrigueras excavadas por ellos mismos o por otros animales. Suelen habitar tierras bajas y prefieren praderas, bosques claros o márgenes de bosque con abundancia de hierba. Dentro de cada grupo se establecen jerarquías independientes para las hembras y para los machos. Las cobayas se comunican mediante una gran variedad de vocalizaciones y lenguaje corporal.

Son animales sociables, curiosos, juguetones y cariñosos que demandan nuestra compañía y la de sus congéneres, por lo que siempre que podamos, debemos proporcionarle un compañero. Los machos pueden convivir juntos correctamente si los juntamos desde pequeños, aun así pueden aparecer problemas de dominancia sobre todo en presencia de una hembra. No obstante, también se adaptan bien a ser mascota única, aunque requerirán compañía y mucha atención, estimulación y socialización por parte de su propietario para desarrollarse correctamente.

En la naturaleza las cobayas tienen muchos predadores. Esto hace que, como parte de su comportamiento, estén siempre alerta ante las amenazas y puedan tener reacciones explosivas de huida. Pueden sentirse amenazadas cuando se las coge de manera brusca, al oír un ruido o al ver objetos, personas o animales que se aproximan rápidamente. Siempre maneje a su cobaya con delicadeza y cuidado. Háblele y tóquela suavemente antes de cogerla en brazos.

No se deberían mantener con conejos ya que estos tienden a limitarlos, tienen distintas necesidades alimentarias y pueden transmitirse infecciones por Bordetella bronchiseptica.

Son animales que se mantienen activos durante el día.

Su esperanza de vida es de 5-6 años, aunque pueden vivir más años.

Las cobayas son muy precoces alcanzando la madurez sexual a los 2-4 meses. Una vez alcanzada la madurez sexual las hembras tienen celos a lo largo de todo el año cada 16-18 días, que son sobre todo aparentes en primavera y verano. Los machos tienen su libido constante todo el año. A los 11-12 meses de vida la pelvis de las hembras que no hayan parido puede quedar completamente rígida impidiendo el parto normal. IMPORTANTE!! Nunca debe cruzar a una hembra menor de 4 meses ni mayor de 7 meses que no haya parido antes.

La gestación dura unos 65 días de media.

 

ALOJAMIENTO

En la naturaleza pasan gran parte de su tiempo de actividad buscando comida en sus territorios, por lo que se mueven constantemente. Este hecho condiciona mucho el entorno en el que tenemos que tener a nuestro nuevo miembro de la familia.

Cuando llega a casa una cobaya, todo es nuevo para ella y es normal que esté asustada. Por ello necesita un rincón donde sentirse protegida y tranquila. Lo mejor es dejarla tranquila durante dos días aproximadamente hasta que se vaya acostumbrando a nosotros y coja confianza.

Las JAULAS más recomendables son las de reja, con suelo de plástico. En cuanto a sus dimensiones cuanto más amplia la jaula mucho mejor pero como mínimo las dimensiones deberían ser de 700 cm2 de suelo por adulto y 40 cm de alto.

Dicha jaula debe estar provista siempre de un refugio (caseta) o estar cubierta por una parte para que el animal se resguarde y se sienta seguro cuando se vea amenazado. Además deberá disponer de un bebedero de goteo con agua fresca cambiada a diario, un comedero solido que no pueda tumbar, una percha para el heno y una esquinera como WC.

En cuanto a su ubicación, tenemos que saber que las cobayas son bastante sensibles a sufrir problemas respiratorios y golpes de calor, por lo que debemos evitar colocar las jaulas en zonas expuestas directamente al sol (sobre todo en verano) o donde haya corrientes de aire, zonas mal ventiladas, con demasiada humedad, con humos o gases como pudieran ser las cocinas y garajes. Para ayudarle a refrescarse en verano puede pasar un paño húmedo y fresco por su dorso. LA TEMPERATURA IDEAL PARA LAS COBAYAS ES ENTRE 17-24 OC.

El sustrato: es muy importante escoger el sustrato adecuado para el fondo de la jaula, ya que el animal está todo el día en contacto con dicho sustrato y ello puede causarle problemas dermatológicos (pododermatitis), respiratorios y gastrointestinales. Los sustratos más recomendables son pellets de viruta prensada. Importante!! NUNCA ARENA ABSORBENTE DE GATOS NI SUSTRATOS QUE GENEREN MUCHO POLVO.

Además, es importante sacarles de la jaula (Enriquecimiento ambiental) todos los días unas cuantas horas (bajo vigilancia) para que puedan hacer ejercicio, no se aburran estando recluidos y puedan relacionarse con nosotros, siempre que contemos con un lugar adecuado y seguro para ese fin (carente de cables, plantas toxicas…) y poniendo juguetes (túneles, maderitas, ramas…) para que tengan un optimo enriquecimiento ambiental.

 

ALIMENTACIÓN

Seis puntos claves que debemos tener en cuenta a la hora de alimentar correctamente a nuestra nueva mascota:

  • es un animal totalmente herbívoro (su alimento principal son los vegetales)
  • son animales que desarrollan preferencias dietéticas desde muy jóvenes, por lo que con el tiempo será difícil cambiarles la dieta, siendo muy importante proporcionarles una dieta equilibrada y de buena calidad desde que son jóvenes.
  • Suelen alimentarse al amanecer y anochecer.
  • Sus dientes y muelas crecen continuamente durante toda su vida.
  • Las cobayas (al igual que nosotros, los humanos) NO SINTETIZAN la VITAMINA C por lo que debemos aportársela con la dieta o mediante suplementos vitamínicos

(10 mg/kg/d).

  • Tienen tendencia a la obesidad, por lo que es importante no sobrealimentarlas.

Por lo tanto, basándonos en estos seis puntos, la dieta de nuestro nuevo compañero debería estar basada en:

  • HENO de buena calidad: debe estar disponible todo el día, ya que favorece el desgaste de los dientes y, además, aporta gran cantidad de fibra que ayuda a mantener el aparato digestivo en óptimas condiciones y previene la formación de bolas de pelo.

Hay henos de muchas calidades y procedentes de muchas plantas diferentes. Lo mejor es elegir un heno lo más fresco posible, es decir, con un color verdoso y olor agradable “a hierba”. Descartaremos los henos amarillentos, con olor a paja u olor desagradable.
Las hierbas más equilibradas son la hierba timotea, la hierba orchard, avena y alfalfa.
Conviene combinar varios tipos de hierba en el heno.
La cantidad de heno no es concreta, más bien siempre ha de haber heno fresco disponible, es decir, que nunca se acabe.

  • VERDURAS Y HORTALIZAS: Deben ofrecerse a temperatura ambiente y estar muy bien lavadas y secadas. Se recomienda darle 2 o 3 verduras diferentes a diario para que disponga de todas las vitaminas que necesita. El alimento verde no puede dejarse muchas horas en la jaula porque fermenta.
  • DIARIAS: acelgas, endibias, berros, escarola, judías verdes (sin semillas), pimiento, endivias, borraja, alcachofa, rúcula, hojas de zanahoria y remolacha, trébol, diente de león, tomate (no la planta).
  • CON MODERACIÓN: brécol (causa gases), zanahoria (mucho azúcar), cilantro, col, perejil, alfalfa (exceso de calcio), apio, canónigos, pepino (exceso de agua, es idóneo para el verano).
  • PROHIBIDO: legumbres (secas o frescas), coliflor, patata, cebolla y ajo.
  • VERDURAS RICAS EN VITAMINA C: berza, pimientos (rojos y verdes), tomates, espinacas, espárragos, hojas de remolacha, endibias, brócoli… y frutas como el kiwi y la naranja.
  • FRUTAS: no abusar de ellas, solo ofrecerlas como un premio, ya que tienen gran cantidad de azucares, una cucharita de café al día y siempre alternando.
  • RECOMENDADAS: cereza (sin la semilla), nectarinas, fresas, manzanas (sin las semillas), mandarina, naranja, pera, melocotón, uvas, melón, sandia.
  • CON MODERACION: piña, plátano, kiwi, mango (sin la piel)
  • PIENSO: es suficiente con 1-2 cucharadas al día. Deberemos escoger un pienso con un 10-15% de fibra y se recomiendan los pellets (pienso extrusionado) en lugar de los piensos con semillas.
  • ALIMENTOS OFRECIDOS DE FORMA MUY OCASIONAL: cereales, galletas, pan.
  • ALIMENTOS PROHIBIDOS: productos lácteos y derivados.
  • OTROS: debemos proporcionarle diferentes maderas para roer para un óptimo desgaste de los dientes, siendo las más apropiadas las procedentes de abedules, hayas, alisos, álamos, sauces, avellanos, manzanos y perales. MITO: las piedras de calcio que se venden frecuentemente NO son recomendables para nuestros compañeros ya que a la larga pueden causar enfermedades del aparato urinario.

 

CUIDADOS BÁSICOS:

No es necesario bañarlos, pero sí es recomendable acostumbrarlos al cepillado (que debe ser diario en cobayas de pelo largo).

Las cobayas ingieren algunas de sus propias heces (cecotrofos) bastantes veces al día. Es un comportamiento normal y una forma de obtener ciertos nutrientes. No obstante, si ingiere todas las heces compulsivamente puede ser signo de miedo o enfermedad.

 

PREVENCIÓN:

Al adquirir una cobaya deberemos llevarla a un veterinario para que le haga una primera revisión.

Se recomienda esterilizar o castrar a las cobayas si no se tiene pensado criar con ellas. Además, en el caso de las hembras es aconsejable para evitar posibles tumores e infecciones uterinas. Mientras que en machos, ayudará a eliminar comportamientos agresivos propios de la época de celo.

Puede llevarse a cabo a partir de los 5-6 meses de edad.

 

DESPARASITACIÓN:

Será necesario desparasitar interna y externamente a nuestros compañeros, sobre todo si tienen acceso a jardines o patios exteriores o si conviven con otros animales como perros o gatos.

Desparasitación interna: cada 4 meses

Desparasitación externa: cada mes.

 

VACUNACIÓN:

No es necesario vacunar a las cobayas.